Mérida, Abril Viernes 19, 2024, 02:17 am
El Ejército de China ha exhibido este martes su nuevo armamento n un desfile en el centro de Pekín para conmemorar los 70 años de la fundación de la República Popular, incluidos misiles hipersónicos que, según los expertos, podrían ser difíciles de contrarrestar por parte de Estados Unidos. En un discurso al comienzo de la marcha, que se extendió por más de tres horas, el presidente chino, Xi Jinping,
dijo que su país se mantendría en el camino del «desarrollo pacífico»,
pero que los militares custodiarían la soberanía y seguridad de la
potencia asiática. El desfile militar fue una demostración de los avances que ha conseguido China
en este terreno con el desarrollo de su industria armamentístico, y
permitió apreciar numerosos equipamientos y misiles nunca vistos hasta
el momento. Entre ellos el nuevo Dong Feng 41, un
misil balístico intercontinental con capacidad para múltiples cabezas
nucleares que podría alcanzar cualquier parte de Estados Unidos (entre
12.000 y 15.000 kilómetros) con una precisión en su objetivo de 100 a
500 metros. Analistas
en Defensa consultados por Reuters lo ven como un mensaje para el mundo
de que el potencial militar de China está creciendo rápidamente en
medio de una crisis marcada por la oleada de protestas antigubernamentales en Hong Kong y una economía en desaceleración. Como
se esperaba, China dio a conocer nuevos aviones no tripulados (UAV) y
mostró sus misiles intercontinentales e hipersónicos avanzados,
diseñados para atacar a los portaaviones y las bases que sustentan a la
fuerza militar estadounidense en Asia. Un
locutor de la televisión estatal tildó el arsenal de misiles de «una
fuerza suficiente para hacer realidad el sueño de una nación fuerte y un
ejército fuerte». El Ejército Popular de Liberación (EPL) también
lanzó un misil hipersónico, conocido como el DF-17, que teóricamente
puede maniobrar superando con creces la velocidad del sonido, haciendo
que sea extremadamente difícil de contrarrestar. Nozomu Yoshitomi,
profesor de la Universidad Nihon de Japón y general retirado de la
Fuerza de Autodefensa Terrestre de Japón, dijo a Reuters que el DF-17
planteaba serias preguntas sobre la efectividad del sistema regional de
defensa antimisiles que Estados Unidos y Japón están construyendo