Merecido galardón recibió el dirigente Alberto Castillo

El conocido dirigente del fútbol nacional Alberto Castillo fue galardonado con la Orden “Santiago de los Caballeros” en su primera Clase, por la Alcaldía del Municipio Libertador en ocasión de la celebración de los 461 años de la fundación de la ciudad de Mérida.

Los actos que se realizaron en los predios de la Plaza Bolívar de La Parroquia, comenzaron con la celebración de la Santa Misa en la Iglesia de Santiago de La Punta, y luego una ofrenda floral ante la estatua del Padre de la Patria.

En una tarima colocada en plena plaza fueron entregadas las condecoraciones a un grupo reducido de homenajeados, personalidades de la vida merideña, y un equipo de béisbol que tuvo destacada actuación recientemente.

El propio Alcalde del municipio Libertador, Alcides René Monsalve, entregó la condecoración a Alberto Castillo, y destacó la trayectoria del experimentado Alberto José Castillo García, quien estuvo acompañado de su señora esposa, Arminda Barrios de Castillo.

Hay que destacar que Castillo recoge los frutos que sembró, siempre trabajando en función del fútbol a nivel nacional e internacional, y recientemente un importante Seminario de fútbol se realizó en Mérida y allí fue igualmente reconocido el aporte de este dirigente al balompié nacional.

 

Algo de su trayectoria

Serían páginas y más páginas las que habría que llenar para resumir la trayectoria de más de 40 años que tiene Alberto Castillo dentro del fútbol, y acá les daremos algunos datos.

Alberto Castillo es hijo de otro experimentado dirigente del fútbol en el oriente del país, Héctor Castillo, quien trabajó durante varias decenas de años por el fútbol en Maturín y todo el estado Monagas. Actualmente con 90 años, pero sigue activo, ya no en el fútbol, sino en otros quehaceres, pues a los 80 años se graduó de abogado y ejerció su profesión.

En el año 69 el jovencito Alberto Castillo se vino desde su Maturín natal a Mérida, para estudiar Medicina en la Universidad de Los Andes, se cambió para Bioanálisis, y en el ínterin comenzó a trabajar en la ULA, llegó a la Dirección de Deportes y allí fue escalando posiciones hasta que salió jubilado.

Paralelamente Alberto Castillo comenzó a darse a conocer en el fútbol merideño, entró en la Asociación como miembro del Consejo de Honor, luego ocupó el cargo de vicepresidente, y estuvo durante un período de cuatro años como presidente de Asofútbol Mérida.

También Alberto Castillo colaboró en los inicios del equipo ULA Mérida FC, y como comisionado de la Federación Venezolana de Fútbol en el occidente del país, en la época en que presidía René Hemmer, y Rafael Esquivel era el vicepresidente, según nos acota el propio Castillo.

A la muerte de Hemmer hubo un movimiento después del cual Rafael Esquivel asumió la presidencia de la FVF, pero Alberto Castillo quedó fuera, mientras que su papá, Héctor Castillo, estuvo formando parte del primer directorio de Esquivel.

Nos cuenta Alberto que su papá decidió retirarse de la Federación, y Esquivel lo llamó para que lo acompañara en el Directorio, y allí comenzó su ascenso a nivel internacional, pues luego fue incluido en la Comisión de Relaciones Públicas de la Conmebol, se inició como Comisario y delegado de la Conmebol en partidos internacionales, y ascendió a la Comisión Técnica de Conmebol y FIFA.

En su trabajo internacional ha sido delegado y comisario de FIFA y Conmebol en infinidad de partidos internacionales, conociendo así todos los países de América del Sur, varios de Centro y Norteamérica, y otros de Europa, cumpliendo en esta labor internacional 28 años en la FIFA y 30 años en Conmebol.

Pero a nivel nacional también ha cumplido Alberto Castillo una gran labor, como delegado federativo en cientos de partidos de primera y segunda división, siendo conocido por su estricto apego a las reglas, sin ninguna concesión.

Hoy en día, ya alejado un poco de la intensa actividad que cumplió en partidos internacionales de Copa Libertadores, Copa Sudamericana o eliminatorias premundialistas y Copa América, Alberto Castillo, para no perder la costumbre, sale de vez en cuando como delegado en partidos del torneo local de primera o de segunda, pero más que todo su función ahora es de asesoramiento, aportando mucho de su experiencia a Jesús “Chucho” Lobo en la conducción de la Asociación Merideña de Fútbol. (Ricardo Cabrera, CNP 3.560).