Mérida, Abril Viernes 19, 2024, 12:45 am
“Quien esté libre de pecado que tire la primera
piedra”, dijo el argentino Ricardo Gareca,
el director técnico de la selección peruana de fútbol, tras renovar el
contrato por tres años. Su meta será clasificar al combinado al Mundial de
Qatar en 2022. La presentación se realizó este martes en medio de un escándalo
de corrupción en el sistema de justicia y que alcanza al presidente de la
Federación Peruana de Fútbol (FPF), el empresario Edwin Oviedo.
La prensa peruana ha difundido desde el 7 de junio un
centenar de audios de conversaciones que revelan una trama de tráfico de
influencias y cohecho en la que participan un juez supremo, un juez superior,
miembros del Consejo Nacional de la Magistratura (hoy desarticulado), fiscales,
empresarios y políticos. Las conversaciones corresponden a la primera mitad de
este año.
Oviedo figura en varios diálogos con el juez supremo
César Hinostroza, quien le pedía boletos para el Mundial de Rusia que usarían
él y su esposa. El magistrado integraba la Sala Penal Permanente de la Corte
Suprema que mediante una revisión del caso falló en 2016 a favor de que el
dirigente deportivo Oviedo no sea investigado por el asesinato de dos dirigentes
sindicales de su empresa azucarera ubicada al norte del país. El caso es
conocido como Los Wachiturros de Tumán.
En abril, un fiscal presentó dos acusaciones pidiendo
26 años de prisión para Oviedo, como presunto autor mediato de los homicidios,
pero el directivo de la Federación peruana de fútbol, en medio de la
efervescencia de la participación de Perú en el Mundial, logró que otro
tribunal suspendiera la acción de la Fiscalía.
Luego de las revelaciones de estos y otros audios,
Hinostroza es investigado por un fiscal supremo. Por norma, tendría que ser
investigado por el Fiscal de la Nación, Gonzalo Chavarry, pero este también
figura en conversaciones de intercambio de favores y de arreglos con Hinostroza
y otros personajes de la judicatura.
Ante este panorama, este mediodía el técnico Gareca
enfrentó decenas de preguntas acerca de la naturaleza de su vínculo con el
presidente de la Federación Peruana de Fútbol. “¿Lo está blindando? ¿Se
sentiría cómodo si estuviera al lado de usted en este momento? ¿Quién planteó
que Oviedo no lo acompañe en su presentación?”, fueron algunas de las
interrogantes en una conferencia de prensa muy esperada. Gareca tenía en vilo a
la afición peruana desde hace un mes, cuando se fue de vacaciones a su país, a
reflexionar si volvería o no a trabajar con la selección blanquirroja. Con su
trabajo, Perú volvió a clasificar a un Mundial luego de 36 años.
“Estoy
comprometido con la Federación y con el país, no con alguna persona en
particular. El presidente de la FPF está aquí, estuvo en la firma del contrato
por la continuidad. Todos me conocen, en la primera vez que me presentó tenía
que estar. Yo tengo un compromiso con lo deportivo, no me gusta enjuiciar a las
personas por sus asuntos personales, de eso se encarga la justicia”, respondió.
Acerca de los jugadores que reclutará para partidos amistosos de fecha próxima y para la Copa América en 2019, dijo que elegirá a lo mejor que Perú tiene en el momento. “La selección (de Perú) puede jugar ante cualquier equipo. El jugador peruano, más allá de que no esté en las mejores ligas, cuando se pone la camiseta de la selección se transforma. Debemos aprovechar esto para que la Selección sea competitiva siempre”, comentó.
En el Mundial de Rusia, Perú anotó solo en dos ocasiones, frente a Australia, pese a mostrar un buen fútbol táctico. La plantilla fue liderada por el capitán Paolo Guerrero; sin embargo, fue eliminada de la fase de grupos por sus derrotas frente a Dinamarca y Francia, la campeona del mundo. EP