Por
Jesús Ernesto Castillo
El
cese de la usurpación, el Gobierno de la primera transición, y las elecciones
libres, conforman el tramo básico de la ruta de reconstrucción nacional; sin
embargo, el camino no termina allí, apenas comienza.
Venezuela necesita un
Gobierno interino, que estableciendo las condiciones necesarias, garantice la transición de la tiranía a la
democracia, materializándose en la celebración de elecciones libres; y un
Gobierno liberal electo, que impulse una segunda transición, de la debacle
económica y social a la prosperidad plena, junto a millones de ciudadanos que aprendimos
de la manera más dolorosa que el socialismo jamás será el camino correcto.
La segunda transición involucra
enterrar de una vez por todas el modelo estatista clientelar, y la repugnante
forma de hacer política aprovechándose de la necesidad de la gente.
La riqueza de una nación no
está bajo sus suelos, sino en sus campos y ciudades, en su gente y su capacidad
creadora, y es fundamental tener un Gobierno que lo entienda.
En Vente apostamos por una
Venezuela Rica de verdad, tenemos todo
el potencial para lograrlo, con recursos naturales y ganas de emprender y
trabajar; sólo nos falta un Estado garante de la libertad, la propiedad, la seguridad
y la justicia, que no busque controlar la economía, sino que vele por su buen
funcionamiento.
De
la barbarie a la democracia, de la destrucción a la prosperidad; 2
transiciones, una sola ruta.