Mérida, Junio Sábado 10, 2023, 01:01 pm
El 2021 fue el reflejo de los esfuerzos continuos de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) para abordar los problemas derivados de la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19) y proseguir, lo más pronto posible, con la recuperación económica pospandémica. Esto implico avanzar en la Iniciativa Estratégica y Holística para Vincular las Respuestas de la ASEAN a las Emergencias y los Desastres (ASEAN SHIELD, por sus siglas en ingles), anunciada en la Declaración de Bandar Seri Begawan en junio; teniendo base los tres pilares de la Comunidad de la ASEAN: político-seguridad, económico y sociocultural.
Ahora, el 2022 se presenta con diversos retos económicos que ameritan una respuesta integral de la ASEAN. El primero reto es el mismo que enfrentan todas las regiones en el mundo: la recuperación económica sostenible tras la pandemia. La nueva variante Ómicron ha obligado a los Estados miembros a crear y poner en marcha con rapidez nuevas iniciativas regionales como el Fondo de Respuesta de la ASEAN al COVID-19, instrumento a través del cual la región planea distribuir vacunas a la población de los países miembros durante el primer semestre de 2022. La meta debe ser lograr la vacunación del mayor número de personas para reducir la probabilidad de cierres y nuevas cuarentenas, que podrían interrumpir las cadenas de suministro y reducir el crecimiento económico regional. Además, es la única vía para evitar volver al proteccionismo que imperó durante la pandemia, con prohibiciones y restricciones a las exportaciones de productos esenciales y a la importación de bienes producidos internamente.
El segundo reto que enfrenta la ASEAN es cómo sortear, de la mejor manera posible, la competencia entre los Estados Unidos y China, que amenaza con ser más conflictiva en 2022. Una forma de amortiguar los impactos negativos de esta competencia pasa por hacer valer las normas de origen de la Asociación Económica Integral Regional (RCEP). Estas permiten a los países de la ASEAN adquirir hasta el 60% (en términos de valor agregado) de las piezas de los productos de las economías que no pertenecen a la RCEP para vender dichos productos libres de impuestos dentro del bloque. Esto da a los Estados miembros un amplio margen para diversificar sus cadenas de suministro con terceros países, y así protegerse eficazmente de las incertidumbres causadas por la rivalidad entre China y los Estados Unidos.
De igual manera, otros retos que enfrenta esta organización son: la situación en Myanmar, el incremento de los flujos migratorios por motivos medioambientales —tormentas, inundaciones, deslizamientos de tierra y sequías—, y los conflictos geopolíticos regionales —Corea del Norte y Corea del Sur, la lucha China-India por el liderazgo en Asia, las tenciones China-Taiwán, entre otros—. Todos ocuparán un lugar destacado en la agenda de la ASEAN en 2022, por ende, la gestión optima de estos retos por parte del bloque regional será crucial para su existencia y su papel como organización regional en el actual contexto de incertidumbre global.
*@zerpasad