Mérida, Diciembre Viernes 06, 2024, 03:21 am
La democracia moderna, basada en el
sufragio universal y en la competencia de los partidos políticos, también implica igualdad, soberanía popular y predominio de
la mayoría sin desconocer a las minorías. Todo, en un marco de convivencia que preserve
el Estado de Derecho, el sistema representativo, los derechos fundamentales y la
división de poderes.
La democracia, no obstante, debe alcanzar objetivos y resultados sociales que exigen organizar el trabajo con eficacia y eficiencia y esto, necesariamente, conduce al tema de la administración y las políticas públicas.
La democracia, para que sirva a los ciudadanos, necesita gobiernos responsables, capaces de atender con justicia y eficiencia las legítimas aspiraciones sociales y los reclamos de la ciudadanía y eso pasa por demostrar que pueden formular y aplicar políticas, administrar la gestión pública y buscar que esas políticas tengan sustentación social.
Las políticas públicas son, fundamentalmente, las herramientas que utilizan los gobiernos para tratar de solucionar los problemas que afectan, de una u otra manera, a todos los ciudadanos. Por eso, la gobernabilidad de la democracia depende del éxito en la implementación de las políticas públicas que persigan el bienestar común.
Para construir una democracia gobernable en Venezuela hoy en día resulta fundamental:
§ Atender con políticas públicas eficientes y eficaces las
aspiraciones sociales relacionadas con el crecimiento y el bienestar económico,
la equidad y la igualdad de oportunidades.
§ Formar ciudadanos, de “abajo hacia arriba”, sobre la base de la
organización e inclusión social.
§ Fomentar la cultura de la participación responsable en los asuntos
colectivos.
§ Reimpulsar la descentralización, entendida como multiplicación de
los polos de poder, porque sólo así los ciudadanos tendrán la oportunidad de
participar en la toma de decisiones y en el diseño y supervisión de las
políticas públicas municipales, estadales y nacionales.
§ Construir espacios para el acuerdo, minimizando la polarización.
§ Adoptar reglas claras y transparentes para ordenar la convivencia, alcanzando
un efectivo equilibrio de poderes.
Los gobiernos que no resuelven los problemas de la gente no pueden esperar que el pueblo, ejerciendo sus derechos democráticos, salga, los apoye y vote por ellos. Quien no supo, ni pudo, atender las necesidades de la gente, no gobierna, destruye.