Rafuche: Un trovador del sentimiento por Orlando Oberto Urbina
A Rafuche se le conocía
como un hombre de tareas educativas preocupado por su pueblo. Así era ese gran maestro, quien
nació un 3 de Junio de 1916, y vivió una vida apresurada de 30
años. Nativo de la Vela de Coro, allívivió y murióRafael
Sánchez López, apodado Rafuche. Fue uno de sus más prestigioso vecinos, y orgullo
de la población. Asi lo expresa
Secundino Urbina, ese destacado médico
y profesor de la facultad de Medicina de la Universidad Experimental
"Francisco de Miranda" en Coro.
La Vela es la capital del municipio Colina, lugar histórico que lleva su nombre en
homenaje a un personaje cuya fama debe llenarnos de orgullo; la gesta de haber
sido un hombre de luchas, un general, un gladiador a la antigua: León Colina, quien fue una gloria
coriana, el bravo de los bravos o el indomable en los campos de batalla. A su
memoria se debe ese nombre. En la Vela de Coro también se izó por primera vez la bandera nacional, por aquel hombre llamado Sebastian
Francisco de Miranda, el general de mar y tierra.
Igualmente, el fundador de la tribu heroica de Cuba, Marcos
Maceo, nació en
Acurigua, una comunidad ubicada en la Vela de Coro. Esta población es una tierra de artesanos,
pescadores, agricultores y de artistas persistentes; es un lugar fecundo en
historias y riquezas que está
a pocos kilometros de la capital del estado y con una carretera nacional en sus
predios.
La Vela es patrimonio de la humanidad, según designación de la
UNESCO en 1993, lo que viene a ser un orgullo para los veleños. Este pueblo tiene
un acervo en el que se encuentran huellas primigenias, y petroglifos. La Vela de
Coro también fue azotada por piratas del Caribe, ante quienes los pobladores debían
estar siempre en vela. Mucho tiempo atrás, había llegado Miranda por sus playas
frente al Caribe. El mar de la Vela es el mismo limita con la bahía de San Juan
de Puerto Rico o de la Habana, baña a Santo Domingo y constituye el llamado tesoro
del Caribe que debemos compartir.
En este amplio litoral, donde la piedra Martín llenó de esplendor su atardecer, Rafuche, -siendo un maestro
que no llegaba a los veinte años- en 1933 ya había fundado una escuela privada en su pueblo, apenas había terminado el sexto grado y
ya entraba a una adultez creativa, fecunda, de altisima responsabilidad: fundar
una escuela y que le fuera aceptada por las autoridades. Fue tan audaz esa decisión juvenil, forjadora de un carácter y de un sendero
disciplinado, dificil, orientado hacia la plenitud.
Secundino Urbina expresa en una publicación de la Asociación
de Escritores de Venezuela, seccional Falcón,
número 13, cómo un poco más
allá de la Vela, en Cumarebo,
Manuel Vicente Cuervo, con sólo
18 años, fundaba también una escuela.
Y en Coro, otro joven llamado Nicolás
Curiel Coutinho formaba educadores nuevos e innovadores en su colegio "Luís Espelozín", desde 1916. Ahora Rafuche no solamente era maestro
y militante social, preocupado por sus vecinos y todo lo que lo rodea, sino que
también incursionaba en la música y la composición, entre 1936 y 1945, en la plenitud
y la integridad de lo vivido.
En los años 40, llegóa la Vela
un maestro de nombre Feijoo Colomine Solarte como director del colegio
"José Ladislao Andara", en
donde ejerciófunciones hasta 1943; luego es sustituido por Rafael Sánchez López de 27 años de edad y una larga y fructífera carrera docente, con su entusiasmo
de excelente compañero.
Rafael Sánchez López se enamoró de una muchacha de la cual tenía su aceptación,
pero debían verse a escondidas de la
familia de la novia. Rafuche la llevaba a soñar y a dar todo su corazón a la amada; pero sucedió algo inesperado: la familia no
aceptó esa relación debido a las diferencias sociales, y enviaron a la
joven a Europa. Este hecho va a causar en Rafuche una depresión que lo llevaría
a un suicidio fulminante con un veneno de acción rápida.
El galeno falconiano y premio nacional de psiquiatría, Marino Colina, niega la depresión en Rafuche, al señalar que "¿Cómo un hombre que después de haber llegado a planos de vivencia tan
elevados, solo asequibles a inteligencias privilegiadas, pueda ser víctima de tretas tan vulgares?"...,
Entretanto, la periodista de la Vela de Coro, Bilha Torres, decía que " la angustia es el
comienzo de la tragedia, que lo asedió,
lo atrapó". Rafuche vivióde una
manera intensa, disfrutó la alegria
de su creación artística, y sintió premiado su esfuerzo para
lograr los fines de su proyecto.
Rafuche compuso temas que golpeaban los sentimientos y, si
uno se encuentra lejos del terruño, siente esa melancolía. Es importante señalar que Rafuche no es un lobo
estepario: había comenzado
a escribir música y poesía, y con algunos amigos creó el Sexteto Veleño, con el que
debutóen la
recién estrenada Radio Coro, propiedad
de Don Roger Leyba, y con ello hacer de los domingos una delicia para un pueblo
orgulloso de escucharlos. Era el líder
de aquella muchachada, cantaba, componía,
tocaba la guitarra que había
aprendido autodidactamente, y se inmortalizó
en la memoria popular del pueblo.
"Viejo compañero/
de la tuna brava y del cardón
altanero/ viejo compañero del torcido tronco/ clavado en el suelo." le
cantaba a su geografia, a su mar, a su crepúsculo,
a su aridez, además le va a cantar
a su circunstancia, como un himno musical, de allí la canción
"Sombra en los médanos":
"bajo el claror de la luna/ sobre las tibias arenas/ y entre cardones y tunas/
un chuchube modula un cantar." Con esa canción logróatrapar ese paisaje que va a percibir el ojo, la piel, su oído, esa belleza percibida de
su tierra.
"De otros distantes paisajes/ surge un concierto de
besos/ es el mar que con su oleaje/ viene a la playa a besar", allí parece deprimido, pero, se
consuela en los cujíes adoloridos
de su canto. "Los cujíes
lloran de dolor/ de su vida mustia de esperar/ las caricias de un lejano amor/ que
ha sombreado mi peregrinar", allí
se vislumbra de nuevo su dolor, ese sufrimiento de toda su vida, el amor que le
quitaron y que nunca volvió
a ver.
Era un gran poeta... y en otra estrofa decía: " y en la ruta que marca el destino/ sobre las
arenas que esperan camino/ dolorosamente se alarga mi sombra/ sobre el medanal".
Recordamos a Neruda, cuando en Veinte poemas de amor y una canción desesperada, que casualmente
escribió a los veinte años, había escrito: " La noche
esta estrellada y ella no está
conmigo (...) Es tan corto el amor y tan largo el olvido (...) mi alma no se
contenta con haberla perdido". Rafael Sánchez
López fue el segundo de los hijos
de Jesús Sánchez y Nicolasa López,
quien falleció por
envenenamiento un 16 de diciembre de 1946, con apenas treinta años de vida fructífera y llena de muchos sueños,
a quien el desamor lo llevóa tomar una decisión
fatal. Que esta semblanza sirva para que no sea injustamente olvidado un hombre
que hizo crecer su presencia y vivencias provincianas.