Qué viene con las precandidaturas en la oposición por Edgar Márquez C.

Las semanas anteriores permiten ver los resultados de varias encuestas de precandidatos, en medio de un discreto accionar de los aspirantes. No hay propiamente una campaña electoral, pero si existen candidatos. No hay fecha de comicios, pero siguen surgiendo personas que se insinúan como candidatos.

 

El tema comenzará a despejarse pronto, porque la Comisión de Elecciones Primarias Opositoras fijó fecha para las postulaciones y concretó que el proceso de votaciones será el 20 de octubre. Es una intención que busca poner orden en lo que será una campaña sometida a muchas presiones, tanto por parte del electorado, por los partidos y hasta por el propio oficialismo.

 

Pero hay que hacer la salvedad, de que la convocatoria se hace desde unos factores de oposición, en el que no están todos. Esto podría lesionar ese evento. No se debería negar el derecho a la participación de todos los que aspiran, más cuando se asegura que se tienen los votos suficientes.

 

Hoy tenemos un gran número de aspirantes, a juzgar por lo que publican los medios y las redes. No tiene nada de raro que algunos, más adelante, digan que no irán a la competencia, por lo que la lista se reducirá. Otros dirán que no van a las elecciones primarias por desacuerdos o desavenencias.  En todo caso, los que se inscriban en ese evento serán una parte importante de los competidores.

 

Debemos esperar, por tanto.

 

Las encuestas muestran resultados desiguales. No falta que alguien diga: las encuestas son ganadas por quién las paga. Otros pueden argumentar que en materia de encuestas hay subterfugios dentro de la llamada ficha técnica. Lo cierto es que resaltan algunos aspectos curiosos.  Por ejemplo, aparecen candidatos que no han dicho que aspiran, otros que no están en campaña y guardan un valioso porcentaje.

 

Otros no tienen estructura partidista ni comandos de trabajo. Y, sin embargo, tienen apoyos en todos los sondeos. Claro, debemos entender que muchos de estos trabajos se hacen en Caracas y que en los cuestionarios se les informa a los encuestados quienes son los que están en esa lista.  Así, cualquiera puede decir a quien considera apto para entregar su voto, que, por ahora, es preferencia.

 

Recientes publicaciones indican que la intención de voto, en estos momentos, entre los más nombrados están la señora María Corina Machado, el mandatario zuliano Manuel Rosales Guerrero, Henrique Capriles y Benjamín Rausseo. Otros que también aparecen son Juan Guaidó, Leopoldo López, el tachirense César Pérez Vivas, al igual que Gustavo Duque, Carlos Ocariz, Antonio Ecarri y David Uzcátegui. Aclaro que nombro a estos dirigentes, sin orden de importancia, eso sí, nombrando primero a las damas y después a los caballeros.

 

Hay que escuchar todas las propuestas. En 1998 la gente buscaba un vengador, y vean que lo consiguieron. En 2023, todavía hay muchos que piensan igual. Hay que acabar con la conflictividad social y buscar enderezar los caminos políticos, para el beneficio de las mayorías. La demagogia también debe ser decantada. Aquí se requiere soluciones, salir del abismo en que cayó el país en materia social, económica y política. Un buen candidato o una buena candidata presidencial, será quien nos dibuje el camino hacia una transición, en que los venezolanos podamos reencontrarnos y unidos, comenzar a resolver esta enorme crisis.

 

La trampa sale

Como parte de lo que me toca aclarar sobre mi participacion como candidato a la gobernación de Mérida, esta semana ocurrió uno de esos eventos, que la política misma se encarga de poner en el tapete. Uno de los dirigentes de uno de los partidos nuevos en Mérida, el cual es presidido nacionalmente por un viejo amigo, ex copeyano y ex candidato presidencial, a quien recibí innumerables veces en Santa Cruz de Mora, en plena campana fue muchas veces a Pinto Salinas. Este joven, sin tomarse la molestia de conversar conmigo, siendo yo alcalde, se dedicó a visitar emisoras de radio y a promover la campana de “alacrán”, en nuestro pueblo. Dijo cualquier cantidad de barbaridades, sin conocer nuestra gestión municipal, acompañada por la labor social de muchos vecinos. También utilizaron a personas, que postularon como candidatos en nuestro municipio. Se basaron en una campana de desprestigio y no de propuestas políticas o soluciones a nuestro pueblo.

 

Cuál es la sorpresa, a través de las redes sociales, aparece el joven dirigente, en una foto, en un acto junto al actual gobernador de Mérida, que es del PSUV. Hago la aclaratoria, porque desde el pasado 21 de noviembre de 2021, a mí, no me han visto en eventos del chavismo, ni haciendo solicitudes a los actuales gobernantes de ningún tipo. ¿Quiénes eran los alacranes? Decía en el post que circulaba.