Mérida, Diciembre Lunes 02, 2024, 07:03 am
El Partido Popular llenó este domingo la Plaza de Felipe II en Madrid para defender la igualdad entre los españoles frente a la amnistía que Pedro Sánchez pretende conceder a los independentistas que dieron el golpe de 2017 en Cataluña. Ante más de 40.000 personas y dos días antes del debate de su investidura, Alberto Núñez Feijóo, ha manifestado que defenderá que «España es un conjunto de ciudadanos libres e iguales».
«Lo que hacen solo tiene un nombre: indignidad, solo tiene unos cómplices, el PSOE actual, y solo tiene un responsable, aquel que está en el Palacio de la Moncloa después de haber perdido las elecciones», expresó el líder popular, que volvió a denunciar que la amnistía no se llevó en el programa electoral y, por tanto, no se votó: «Es un fraude agravado y reiterado por la misma persona». Recalcó, además, que esto no va de partidos ni de territorios, sino de principios y derechos: «Nadie puede ser más que nadie en la España constitucional».
Núñez Feijóo cargó contra las cesiones del jefe del Ejecutivo al separatismo, entre ellas la más reciente, la reforma para permitir en el Congreso el uso de las lenguas cooficiales: «Se va a entenderse, no a traducirse». Y recalcó, que si en España finalmente hay un gobierno sustentado en la amnistía y en la desigualdad, será responsabilidad de Sánchez «por demostrar una absoluta falta de integridad moral y política».
En su intervención, el presidente de los populares tuvo palabras de agradecimiento a los 33 diputados de Vox y los dos diputados de UPN y de Coalición Canaria, que han confirmado su apoyo a la investidura este martes. También, hacia aquellos históricos dirigentes socialistas que estos días alzan su voz contra la amnistía y la deriva de su formación. De estos últimos señaló que podrán ser expulsados por un PSOE que, según expresó, ya no es un partido de Estado, pero «serán señalados por la mayoría de los españoles como hombres y mujeres de Estado, que eso es lo importante».
Aseguró también Feijóo, como hizo días atrás, que él se debe «exclusivamente» a los españoles. «Para ellos estoy», manifestó, indicando que pase o no por la Presidencia del Gobierno, en lo que a él respecta «lo que quedará para España será la libertad, la igualdad y la dignidad». Recordó, además, que los políticos pasan y lo que queda con el tiempo es lo que hicieron y defendieron: «Allá Pedro Sánchez cómo quiere ser recordado en la historia de nuestro país».
Palabras especiales tuvo para sus antecesores al frente del PP, quienes en su momento recibieron del rey el encargo que hoy asume él, los expresidentes José María Aznar y Mariano Rajoy. Frente a la consideración que se da en el PSOE a sus históricos líderes, Núñez Feijóo les reivindicó como «la memoria presente de la mejor España». «No son el pasado, son el presente, son la guía para ordenar el futuro de nuestro país», subrayó.
La presencia la mañana de este domingo en el acto del Partido Popular de quienes ostentaron la Presidencia del Gobierno durante buena parte de las últimas dos décadas, como la de todos los presidentes autonómicos del partido, quiso reflejar unidad en torno al líder popular y trasladarle su respaldo a 48 horas de exponer su proyecto de país en una sesión de investidura a la que acude sin los apoyos suficientes. El mensaje que lanzaron Aznar y Rajoy fue unánime: «Estamos aquí».
«Venimos a decir que estamos dispuestos a movilizar todos los esfuerzos, a llegar a todos los ciudadanos, a insistir en nuestras razones para evitar que se consume un ataque sin precedentes al marco de convivencia de todos los españoles», trasladó José María Aznar, que indicó que este ataque no procede solo de los «enemigos de la Constitución», sino de un partido «que tiene la obligación de defenderla y no lo hace», en alusión al PSOE.
El expresidente calificó la amnistía como una infamia y fue rotundo al
expresar que nunca aceptarán lo que esta significa, que es, según
denunció, aceptar que los responsables del golpe del 2017 tenían derecho
a hacerlo, o que los jueces y tribunales prevaricaron o que España «ni
es un Estado de derecho ni una democracia legítima». «Eso no vamos a
aceptarlo nunca. Que quede claro», aseveró, al tiempo que recalcó que
como partido y como sociedad utilizarán todos los medios legales y
democráticos para evitar que se consume. AGENCIAS