Mérida, Marzo Viernes 29, 2024, 07:47 am
Varios frentes quedaron abiertos para la Justicia porteña tras los hechos
que tristemente decoraron la (aún no jugada) Superfinal de la Copa Libertadores
entre River y Boca en el estadio Monumental.
En orden cronológico, la vinculación entre lo secuestrado en los
allanamientos del viernes (300 entradas y siete millones de pesos) y la
dirigencia de River; el cruce entre hinchas y policías en las afueras del
estadio, junto al ataque al micro del plantel de Boca, y el caso de la mujer
que apareció en un video encintando bengalas al cuerpo de una criatura para
entrarlas al estadio.
Luis Cevasco, fiscal general de la Ciudad, aclaró cada situación. La más
fuerte, quizá, se posa sobre lo sucedido el viernes cuando se sucedieron
allanamientos simultáneos a la casa de Héctor "Caverna" Godoy y José
Uequin, conocido como "Bolsa de Papa". En el domicilio del primero se
secuestraron 300 entradas y dinero por un total de 7 millones de pesos.
La investigación es encabezada por el fiscal Norberto Brotto, que ordenó
una serie de allanamientos a las oficinas del estadio de River.
"Las entradas son reales, las chequeamos con el sistema de acceso al
estadio. Y no son de protocolo. Son nominales, o sea que tienen una
identificación. Otro punto que se investiga en este caso es si hubo filtración
de información. Ni Godoy ni Uequin estaban en sus domicilios al momento de los
allanamientos", confirmó Cevasco a Clarín.
Ante la consulta por la situación procesal de ambos, detalló que la
reventa de entradas es una instancia contravencional, y no un delito, y que no
aplica prisión preventiva en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires.
Otro foco de investigación importante, aunque mucho más complejo, es el
de la situación vivida en los alrededores del estadio. A través de la revisión
de decenas de videos se trata de identificar a los atacantes del micro de Boca,
a los que durante largos minutos se enfrentaron a la policía en Libertador y
Monroe, y también a los que cometieron actos de vandalismo y robos en las
cercanías a la cancha.
Las figuras legales en esos casos son "contravención". Pero
además se suman ítems que comprometerían a otros protagonistas del bochorno.
"Omisión de recaudos y organización" e "incumplimiento del deber
de funcionario público". Puntos que, desde ya, involucran a los encargados
de ordenar el operativo, a jefes policiales y a los agentes que allí actuaron.
A cargo de todo esto está la fiscal Adriana Bellavigna.
Otra situación, también bochornosa, fue la que se descubrió a partir de
un video casero, tomado por una persona con su celular y desde un vehículo: una
mujer adhiriéndole con cinta varias bengalas alrededor del cuerpo a un menor.
La fiscal Adriana Bellavigna inició una investigación para reconocer a
los involucrados a través de sistemas de tratamiento de imágenes y tareas de
investigación en redes abiertas de datos y redes sociales.
El Cuerpo de Investigaciones Judiciales de la Ciudad de Buenos Aires logró
la identificación de las personas y su domicilio, y le presentó las pericias a
la fiscal.
En las imágenes analizadas fue posible detectar el uso de un reloj en la
persona que colocaba las bengalas al pequeño, objeto que se observó en otra
imagen en una red social asociada a los identificados.
Con esos datos, Bellavigna solicitó la orden de detención de la mujer
-que fue autorizada después por una jueza- por el delito de "poner en
riesgo la vida del menor a quien tienen el deber de proteger", penado con
un mínimo de 2 a 6 años de prisión.
CLARIN