Mérida, Enero Domingo 26, 2025, 05:32 am
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) expresó este jueves que el camino hacia las elecciones presidenciales para el 28 de julio están llenas de desigualdades. En un llamado a la ciudadanía, la Iglesia instó a una participación masiva, subrayando que el voto es la herramienta esencial para contrarrestar el desaliento y fomentar la esperanza.
En una rueda de prensa celebrada el jueves 11 de julio, la CEV presentó la Exhortación Pastoral de la CXXII Asamblea Plenaria Ordinaria. Los obispos de las provincias de Maracaibo (estado Zulia) y Coro (estado Falcón) fueron los encargados de leer el documento.
El documento leído por monseñor Juan de Dios Peña, obispo de El Vigia-San Carlos del Zulia, afirma: "No hay igualdad de oportunidades para todos. Es esencial para la paz ciudadana que cese la persecución y el hostigamiento hacia aquellos que facilitan medios para concentraciones y que se garantice la libertad de movimiento para los candidatos opositores". De igual forma criticaron las prácticas desleales y carentes de ética política observadas hasta ahora.
Importancia del CNE
La Conferencia Episcopal subrayó la importancia del Consejo Nacional Electoral (CNE) como garante de un proceso justo. Respetar la ley en aspectos como los testigos de mesas, las tarjetas electorales y la ubicación de los centros de votación es crucial para asegurar la transparencia y la confiabilidad de los resultados. La organización de obispos destacó la necesidad de que el CNE actúe con autonomía e independencia.
La CEV también manifestó su preocupación por el deterioro constante en los sistemas educativos, alimentarios, de salud, servicios públicos, participación ciudadana, justicia y libertades fundamentales. Señaló que muchas instituciones del Estado se han vuelto autoreferenciales, agravando la situación.
Llamado a la participación ciudadana
La CEV insistió en que el pueblo tiene una nueva oportunidad para tomar decisiones a través del voto libre, capaz de generar un cambio en la democracia, la sociedad civil y la calidad de vida. "«Solo venciendo la apatía podremos avanzar en la reconstrucción del país. La democracia, además de ser un sistema político, es una forma de vida", afirmó monseñor Peña, instando a recuperar la vocación ciudadana.
El reto actual, según el cuerpo episcopal, es transformar la política en una convivencia solidaria. "El 28 de julio debe ser un día de júbilo democrático, no solo en el país, sino también para nuestros hermanos migrantes, quienes esperan reunirse con sus seres queridos en una patria que les ofrezca oportunidades de desarrollo".
Versión Final